Veintena 1: Atlcahualo

Nombres: Atlcahualo: “se dejan las aguas”, “detención de las aguas”, “dejan las aguas”, “cesación del agua”; atlmotzacuaya: “el agua cesaba, paraba”; xilomaniztli: “ofrenda de jilotes”; cihuaílhuitl: “fiesta de mujeres”; cuahuitlehua: “se yerguen los árboles”, “levantamiento de postes”.

 

Deidades asociadas a los ritos: Tlaloques (montañas con nombre de dioses: Cuauhtépetl, Yoaltécatl, Cócotl, Yauhqueme, Poyauhtécatl, Matlalcueye, Quetzálxoch, Tláloc, Chalchiuhtlicue.

 

Ritos principales

Estaban dedicados principalmente a los tlaloques y los principales consistían en el levantamiento de estacas con papeles en distintas partes de las poblaciones y el sacrificio de niños. Éstos eran seleccionados entre los propios mexicas y se les compraban a los padres. Se daba preferencia en la selección a aquellos que habían nacido bajo un signo favorable a los que tenían dos remolinos en el cabello, lo que era considerado un indicio de que los dioses los habían elegido para el sacrificio. Los niños pasaban la noche en la llamada “casa de la tristeza”, el templo de los tlaloque. Las personas que los veían lloraban y se esperaba que los niños hicieran lo mismo, pues sus lágrimas simbolizaban la lluvia. Los niños, ricamente ataviados con plumas verdes y jade, se sacrificaban en grupos, en montañas asociadas a los tlaloque; en Tepetzinco, un islote, se sacrificaba a una niña vestida de azul que representaba a Quetzálxoch; en Pantitlan se sacrificaba a los representantes de Epcóatl. Otros ritos en esta veintena eran: la erección de Tota, el árbol que sostenía el firmamento, las ofrendas de tortas de maíz y la presentación de los guerreros que serían sacrificados en la veintena siguiente, tlacaxipehualiztli, y se fingía su sacrificio con un cuchillo hecho con pan de maíz.

 

Tomado de Arqueología Mexicana, Edición especial núm. 59, 3 ácatl / 2015. El calendario mexica y el calendario actual.