Los amantecah y la especialización del trabajo

Laura Filloy Nadal

Mosaicos de plumas

Este texto es una conferencia que se presentó en el otoño de 2022 en el Museo Nacional de Antropología, en el marco de la Cátedra Eduardo Matos de la Universidad de Harvard, que ahora se ha adaptado para constituir un número especial de Arqueología Mexicana.

El Códice Mendoza también es una excelente fuente para entender cómo llegaban y circulaban los bienes suntuarios a la capital del imperio. En varias de sus láminas se registra el envío de coloridas plumas de diversos tamaños, aunque se desconoce cómo se cuantificaban. Incluso pueden inferirse algunas de sus características físicas. También se menciona la recepción, para las arcas del emperador, de ejemplares vivos y taxidermizados de distintas aves, además de diversos objetos emplumados como mantas, trajes guerreros, escudos y otras divisas. 

Los documentos del siglo XVI registran el uso de alrededor de 20 especies de aves en las labores plumarias, entre ellas la guacamaya roja, los pericos, el ibis espátula rosada, la cotinga azuleja y el quetzal, por mencionar algunas.

La creación de objetos complejos requería de tiempo y, sobre todo, de especialistas que dominaran la técnica y los materiales. El Códice Florentino da cuenta de las actividades de los artesanos especializados, llamados amantecah en náhuatl, que trabajaban la pluma y que vivían en Tenochtitlan. Unos laboraban en los palacios y confeccionaban objetos para dignatarios y nobles; otros trabajaban de manera más independiente en los barrios residenciales, los más afamados fueron los del barrio de Amantlan, de ahí el nombre de amantecah.

Imagen: Los distintos tipos de insignias que los amantecah hacían con plumas. Códice Florentino, lib. IX, f. 61v-62r. a) Tecpan amantecah (quienes elaboraban los atavíos de los dioses). b) El trabajo de la pluma. Fotos: Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.

Laura Filloy Nadal. Restauradora por la Escuela Nacional de Conservación, INAH, tiene una maestría y un doctorado en arqueología por la Sorbona de París. Es curadora asociada de las colecciones de América antigua en el Museo Metropolitano de Nueva York.

Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:

Filloy Nadal, Laura, “Mosaicos de plumas”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 111, pp. 48-61.