Teotihuacan y los migrantes

Linda R. Manzanilla

Teopancazco, un centro de barrio multiétnico de Teotihuacan

Teotihuacan, una ciudad excepcional de la Mesoamérica del Clásico, se desarrolló principalmente entre 150 y 650 d.C.; tuvo una superficie enorme (20 km cuadrados) y era capital de un estado de primera generación; albergó una población producto de un crisol de pueblos de diversas procedencias; una organización social que contrastaba con la maya de esos tiempos, ya que privilegió a los grupos sociales frente a los individuos.

La población de Teopancazco

A diferencia de los conjuntos residenciales, los centros de coordinación de los barrios fueron, como revela el caso de Teopancazco, escenarios para las actividades de los hombres. El 85% de los adultos enterrados allí fueron individuos masculinos, y sólo el 15% fueron mujeres, muchas de ellas foráneas, que se dedicaron en vida a las artesanías especializadas.

Varios individuos hallados en Teopancazco migraron a la ciudad gracias a las caravanas organizadas desde cada centro de barrio que venían desde regiones afines y con alianzas, y a las ventajas que ofrecía el trabajo en el centro de barrio, que permitía a los trabajadores obtener alimento de manera cotidiana. Varios de ellos habían ya sufrido estrés nutricional en la infancia, y la migración a la gran ciudad sugería mejores condiciones de vida. Gracias a los isótopos de estroncio y a los isótopos de oxígeno sabemos que los migrantes venían principalmente de Veracruz, Hidalgo, Puebla y Tlaxcala, y algunos de Oaxaca y Chiapas. Asimismo, sabemos que los cuatro grupos genéticos de Mesoamérica (A, B, C y D) estaban presentes en Teopancazco, lo que subraya la diversidad biológica de la población.

Gracias a los estudios de marcadores de actividad en el esqueleto se pudo distinguir quiénes fueron los que confeccionaron los trajes vistosos de Teopancazco; quiénes lanzaron las redes que atraparon las 14 variedades de peces; quiénes ablandaron fibras con los dientes; quiénes cargaron pesos y caminaron con las caravanas hacia Nautla; y quiénes bucearon en aguas frías para abastecer al barrio de la gran variedad de moluscos marinos.

Imagen: Mapa: Ruta de las caravanas de Teopancazco hacia Nautla, Veracruz. Información: Gerardo Jiménez y Linda R. Manzanilla; Ilustración: Raíces. Arriba a la izquierda: Sacerdote del océano llevando a cabo rituales relacionados con el ciclo agrícola. Dibujo: Adela Breton, 1990; Reprografía: Marco A. Pacheco / Raíces. Abajo a la izquierda: Cuenco naranja laca, C206. Foto: Oliver Santana / Raíces. Derecha: Una gran cantidad de elementos encontrados en Teopancazco pertenecen a otras regiones como Tlaxcala, Guerrero y Puebla, tal es el caso de la cerámica Naranja Laca, hallada en el entierro 105, que proviene de la Mixtequilla en Veracruz. Foto: Oliver Santana / Raíces.

 

 

Linda Rosa Manzanilla Naim. Arqueóloga, maestra en ciencias antropológicas y doctora en egiptología. Investigadora del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM y miembro de El Colegio Nacional. Ha dirigido cinco proyectos en el valle de Teotihuacan.

Manzanilla, Linda R., “Teopancazco, un centro de barrio multiétnico de Teotihuacan”, Arqueología Mexicana, núm. 157, pp. 28-33.

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