El espejo de obsidiana en el que se vio reflejado Quetzalcóatl aún tiene funciones que cumplir. Estas notas, escritas para recrear el diálogo entre la arqueología y la literatura y rendir tributo a uno de los mayores exponentes de esa conversación, Eduardo Matos Moctezuma, procuran demostrar que el mundo antiguo, que durante siglos se vio como algo ya transcurrido e incluso clausurado, continúa abierto. El tiempo no está quieto. A través de la arqueología, las piedras del origen vuelven a nosotros; a través de la literatura, son dichas de otro modo. En 2021 se cumplirán 500 años de la caída de Tenochtitlan. El desafío de la inclusión sigue siendo una asignatura pendiente en la desigual sociedad mexicana. En su versión literaria de la Piedra del Sol, Octavio Paz alude a una comunidad todavía futura, “los otros todos que nosotros somos”. El reconocimiento de lo propio depende de lo ajeno, en la misma medida en que el porvenir se alimenta de otro tiempo. El pasado tiene mucho futuro por delante (Juan Villoro).

Literatura y arqueología han estado siempre relacionadas. Si volteamos la mirada hacia el pasado veremos cómo la historia nos da múltiples ejemplos de esta relación que se pierde en el tiempo. En el caso de Occidente, tenemos buenos ejemplos, como los escritos de Tucídides acerca de la guerra del Peloponeso, o Plutarco cuando describe el encuentro de los restos de Teseo, o los relatos de Homero acerca de la guerra de Troya y el regreso de Ulises a Ítaca. Virgilio escribe La Eneida y las palabras de Herodoto nos dicen de muchos aspectos históricos y, sin ir tan lejos y más cercano a nosotros, la Historia verdadera de la conquista de la Nueva España, de Bernal Díaz del Castillo, y los 12 libros de fray Bernardino de Sahagún que forman su Historia general de las cosas de Nueva España, y tantos otros cronistas de Indias, nos brindan una información, en ocasiones detallada, de las singularidades de los pueblos y de los procesos históricos que a menudo se entreveran con el mito.

CONTENIDO

Juan Villoro. Presentación, Eduardo Matos Moctezuma, p. 8. El espejo de obsidiana. Arqueología y literatura, p. 12. Una linterna alumbra el pasado, p. 14. La contracultura, p. 30. Itinerario personal, p. 36. Las palabras de las piedras, p. 44. La poesía, p. 60. Para leer más…, p. 90.