Todos los pueblos de Mesoamérica tuvieron sistemas de numeración vigesimales. Este sistema se basa en múltiplos de 20, a diferencia del sistema decimal nuestro, basado en múltiplos de 10, o del mesopotámico, con base en múltiplos de 60. Desde 600 a. C. y hasta 900 d. C., la mayor parte de los pueblos de Mesoamérica usaron dos elementos para escribir los números: un punto, con valor uno, y una barra, con valor cinco. Con esta combinación se escribían todos los números del 1 al 19. Después del 19 venía el cero, seguido del uno, dos, tres, y así sucesivamente. Después de 900 d. C. los mixtecos y los mexicas escribieron los números con puntos y ya casi no usaron las barras. La posición de los números también tuvo un valor (especialmente entre los pueblos de la costa del Golfo después de 50 a. C., y entre los mayas de las Tierras Bajas), como ocurre en nuestros decimales 10, 100, 1000, etc. Los equivalentes vigesimales eran 1, 20, 400, 8 000 y 160 000, en otras palabras, 20 unidades del primer grupo formaban una unidad del segundo, y así sucesivamente.
Tomado de Joyce Marcus, “Los calendarios prehispánicos”, Arqueología Mexicana, núm. 41, pp. 12-19.