Armamento y organización militar de los mayas. La guerra durante el Clásico Tardío
Los sistemas de armamento
En una sociedad militar compleja, el armamento forma conjuntos que funcionalmente tienen correspondencia estratégica entre sus aspectos defensivos y ofensivos. Los elementos son complementarios y se adecuan mutuamente para optimar el potencial bélico. Cada unidad combativa, constituida por el guerrero y sus correspondientes armas, puede ser considerada un “sistema de armamento”. La relación práctica de los componentes de cada sistema especializa su función en el campo de batalla.
Los mayas del Clásico Tardío representaron artísticamente tres sistemas de armamento que corresponden a las armas encontradas en el registro arqueológico. Los dos tipos de lanza y el lanzadardos constituyeron el arma principal de cada sistema, complementado posiblemente con hachas, garrotes, mazos, cuchillos y hondas como armamento secundario.
El lancero pesado
El primer sistema de armamento es el que he llamado “lancero pesado”. Su arma principal era la lanza de corte y contusión, de más de 2.10 m de longitud y manejada a dos manos. Es el que aparece mejor protegido en las representaciones; porta una armadura que incluye un traje de algodón o carrizo rígido que cubre el torso, pectoral, peto, faja y faldellín, así como casco, rodilleras, muñequeras y tobilleras. El pequeño escudo redondo va fijo al antebrazo y es útil solamente para desviar los golpes del atacante. Su función se complementa con un escudo largo y flexible, que va del extremo de la lanza a una mano. El arco y la flecha no parecen haber sido utilizados para la guerra.
Carlos Brokmann. Arqueólogo por la ENAH. Ganador del Premio Palenque. 1995.
Brokmann, Carlos, “Armamento y organización militar de los mayas. La guerra durante el Clásico Tardío”, Arqueología Mexicana, núm. 19, pp. 66-71.
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