La investigadora emérita del INAH Lourdes Suárez Diez, recibirá un homenaje por su trayectoria y aportes en el estudio de materiales arqueológicos de concha, la especialista recibirá un homenaje este martes 26 de octubre y en su honor se desarrollará el Coloquio “Avances y perspectivas en la investigación de los materiales arqueológicos de concha”, organizado por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través de la Dirección de Etnohistoria de la Coordinación Nacional de Antropología del INAH y del Museo del Templo Mayor. El homenaje-coloquio se llevará a cabo de las 10:00 a las 15:00 horas., a través del canal de INAH TV de YouTube, en sintonía con la campaña “Contigo en la distancia”.
“Las conchas y los caracoles me encontraron a mí…, y no yo a ellos”, expresa la profesora investigadora emérita del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), María de Lourdes Suárez Diez, a quien cariñosamente sus alumnos la identifican como “Concha” Suárez.
La investigadora de la Dirección de Etnohistoria del INAH, con más de 50 años de trayectoria profesional, se rehúsa a admitir que es pionera a nivel internacional en el estudio de ese material. “Con honestidad, no sé si mi clasificación y tipología sean las mejores…, simplemente no hay otras”, sostiene al momento de esbozar una leve sonrisa. Lo que sí reconoce es que estudiosos de distintos países recurren a ella para solicitar sus opiniones y asesoría.
A medio siglo de distancia de que iniciara con este tipo de estudios, hoy la bibliografía disponible es de la autoría de Lourdes Suárez Diez. Esa labor de campo y de escritorio, así como su extenso conocimiento, la han llevado a varios países como Rusia, Japón, Grecia, Chile, Italia, Holanda y Suecia, por citar solo algunos, para dictar conferencias a especialistas.
Con la sencillez adquirida a lo largo de más de 40 años de docencia, desde el nivel medio superior hasta el doctorado, la investigadora emérita hizo a un lado el lenguaje técnico y puntualizó que aún falta mucho por analizar, como la presencia y el uso que tuvieron tales materiales marinos en gran parte del país, y no solo en las zonas costeras.
Los mayas, hasta donde se sabe, “no fueron tributarios del Imperio mexica, lo que fortalece la hipótesis de que ambas culturas tuvieron contacto por la venta o intercambio de distintas mercancías, entre ellas, conchas y caracoles”, especifica. Las pirámides, los huesos, la cerámica y la pintura no son los únicos indicios que tenemos para estudiar el desarrollo de las culturas prehispánicas, las conchas y los caracoles son una fuente importante de estudio y análisis, finaliza.
Con información de la Dirección de Medios de Comunicación del INAH.