Este códice debe su nombre a la cruda escena central que muestra un suplicio poco referido en las fuentes, conocido como aperreamiento. Consistía en azuzar a un perro contra una persona indefensa para que lo devorara. El documento presenta un sistema mixto: utiliza la imagen y la glosa alfabética en idioma náhuatl para comunicar información.
Ubicada en la parte más alta de la ciudad, esta estructura se distingue porque aquí se localizaron fragmentos de columnas esculpidas que ahora se encuentran en el museo de sitio. Al parecer, esos fragmentos corresponden a tres columnas que sostenían el pórtico del edificio. El motivo principal de las escenas grabadas en las columnas es la exaltación de los gobernantes del sitio. Uno de ellos, el llamado 13 Conejo, es representado varias veces.
El hallazgo de una estela relacionada con la fecha 7 baktún en la cuenta larga confirma que El Trapiche, Chalchuapa, fue la capital del occidente de El Salvador durante el Preclásico Tardío.
La casa representaba el mundo y cada elemento tenía un significado preciso. El hogar al centro era una proyección del axis mundi y simbolizaba el corazón de la familia, el techo sostenido por cuatro postes era el cielo.
Esta nueva inscripción mexicana, lograda el 2 de julio de 2018 en Manama, reino de Bharein, representa un cambio de concepto y de perspectiva para la evaluación de bienes con excepcionales valores yuxtapuestos e interrelaciones naturales y culturales integrales.
El nombre que ahora reciben este tipo de objetos procede de la palabra española bezo, utilizada para referirse a la parte exterior de la boca que cubre la encía.