Objetos de jadeíta del ajuar funerario de Pakal. Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces

Máscara de Pakal II. El rostro del gobernante fue cubierto con esta máscara, que está elaborada con placas de jadeíta y cuyos ojos muestran aplicaciones de concha y obsidiana. La jadeíta tenía una significación profunda para los antiguos mayas: representaba los líquidos vitales (como el agua y la sangre) y la regeneración del mundo vegetal. Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces

Dios-Árbol. Esta pieza de jadeíta fue localizada dentro del sarcófago, junto a los pies de Pakal II. La deidad representada es el Dios-Árbol, cuyo rasgo más característico es una larga mandíbula que forma una especie de ganchos. La asociación de esta deidad con los restos del gobernante confirma el significado de la imagen de la lápida, en donde el árbol cósmico sirve como medio para llegar al inframundo. Sala Maya, MNA. Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces

Orejeras de Pakal. Los cartuchos glíficos de estas dos piezas de jadeíta forman un solo texto continuo, interesante y poético. Además de su valor literario, ofrece un dato histórico importante, pues refiere al tributario de las orejeras, el señor O’-Kan, dignatario de Lah, una población que estaba sujeta al señorío enemigo de Piedras Negras. En la inscripción se lee: “Nueve son las Imágenes de la Grandiosa Neblina del dios Yopaat, De Fuego es la Luminosidad del dios Chaahk, (él es) El Venerable Padre del Señor Luminoso, el Señor (del lugar llamado) Lah. Éste es el nombre del tributo de jadeíta del (Señor) O’-Kan Él partió un hombre ante la presencia del (dios llamado) De Fuego es el Golpe Violento [el Rayo] del Chaahk de la Boca Azul”.  Digitalización: Raíces