Una de las conclusiones de la investigación del cálculo de la energética arquitectónica de la construcción es que los grandes proyectos arquitectónicos podían controlarse, organizados por administradores con experiencia y bajo la dirección de los arquitectos de la realeza. Trabajadores teotihuacanos construyendo la llamada pirámide de Sol, supervisados por un dirigente. (Teotihuacan, Estado de México, 200 d.C.)
Tomado de Elliot M. Abrams, “La construcción de las grandes pirámides de México”, Arqueología Mexicana núm. 101, pp. 64-67.
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