La noción de “estilo” y la arqueología

Renato González Mello

En memoria de Alfredo López Austin

Ana Teresa Ordiales

Aunque la sanguina utilizada para una parte de los dibujos coincide con el color de las piezas de cerámica, hay también el propósito de destacar los aspectos formales de las mismas, y entre éstos el que se refiere a la organización de los volúmenes.

Esto provoca una cierta economía de medios que, sin embargo, se modera bastante cuando aparece otra característica que notoriamente interesaba al coleccionista y a su discípula: la pintura corporal. Muy posiblemente Rivera haya estado atento al éxito que había tenido Covarrubias al intervenir en el debate entre los arqueólogos, y es posible que esta elaboración de herramientas para organizar su colección respondiera a la ambición de hacer, con su colección de Occidente, algo parecido a lo que había logrado su colega al ayudar a caracterizar a los “olmecas”.

Son muchos los murales en este periodo en los que Rivera intenta interpretar la vida y el arte de la antigua Mesoamérica, pero hay un motivo por el que su intervención no tiene la misma profundidad. A diferencia de Covarrubias, que no dudó en articular sus ideas alrededor de la noción de “estilo”, Rivera desconfiaba bastante de ese artefacto teórico, al que asociaba con las vanguardias europeas en las que había participado en su juventud, para luego alejarse en forma bastante radical. Da la impresión de que el “estilo” es un mediador necesario entre la práctica artística y la investigación arqueológica.

A diferencia de Covarrubias, que no dudó en articular sus ideas alrededor de la noción de “estilo”, Rivera desconfiaba bastante de ese artefacto teórico, al que asociaba con las vanguardias europeas en las que había participado en su juventud, para luego alejarse en forma bastante radical. Da la impresión de que el “estilo” es un mediador necesario entre la práctica artística y la investigación arqueológica.

Imagen: Diego Rivera-Ana Teresa Ordiales, ca. 1955: Estudio de peinado y tocado. Figura prehispánica del Occidente de México, lápiz sobre papel. Colección particular. Foto: © Francisco Kochen, tomadas de Diego Rivera. Coleccionista, 2007.

Renato González Mello. Doctor en historia del arte por la UNAM. Curador del Museo Carrillo Gil (1989-1992), Investigador del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM. Profesor en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.

Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:

González Mello, Renato, “Ana Teresa Ordiales”, Arqueología Mexicana, Edición especial, núm. 105, pp. 64-65.