El significado de las lápidas arqueológicas de Tejupilco
Esas lápidas son planchas de forma rectangular que miden hasta 1.80 m de largo por 1.60 de ancho (con un grosor que va de 20 a 60 cm). Están pulidas y tienen labrados perfiles ejecutados con maestría. A la más voluminosa, la del Rancho Icamex, se le ha estimado un peso de entre tres y cinco toneladas.
Charles R. Wicke y Maudie Bullington visitaron el poblado de San Miguel Ixtapan, municipio de Tejupilco, y tomaron las primeras fotografías de tres lápidas empotradas en las paredes de la iglesia y de otra lápida que vieron en un paraje cercano.
En su artículo titulado “A posible Andean influence in Central México” (1959), escribieron: “las losas de piedra descubiertas recientemente en la región cerca de Tejupilco, en el Estado de México, fueron esculpidas con un simple bajo relieve y con un audaz estilo geométrico, diferente a los estilos mesoamericanos conocidos, pero con sorprendentes paralelos en los Andes peruanos”
Nos es difícil opinar, por medio de rasgos aislados, sobre los vínculos que debieron existir entre Mesoamérica y los Andes.
En las excavaciones extensivas que Morrison Limón Boyce (1994) realizó en la zona arqueológica de San Miguel Ixtapan se localizaron, en contexto, un par de lápidas. El hallazgo tuvo lugar en el Recinto de las Esculturas, espacio rectangular delimitado por muros de mampostería, con entrada por el oriente. Adentro había un altar integrado por un pedestal rectangular y sobre él dos esculturas de piedra verde, flanqueadas por dos losas colocadas de manera vertical.
Imagen: Recinto de las Esculturas. Zona arqueológica de San Miguel Ixtapan, Tejupilco, estado de México. Foto: Víctor Osorio Ogarrio.
Víctor Ángel Osorio Ogarrio. Estudió arqueología en la ENAH. Coordinador del museo y la zona arqueológica de San Miguel Ixtapan. Ha publicado estudios sobre la sal en la época prehispánica.
Marco M. Vigato. Presidente de la Asociación para la Investigación Arqueológica arx Proyect A.C. Licenciado por la Universidad de Bocconi de Milán y maestro por la Universidad de Harvard. Desde hace seis años realiza investigaciones arqueológicas en México.
Ángel Osorio Ogarrio, Víctor y Marco M. Vigato, “El significado de las lápidas arqueológicas de Tejupilco”, Arqueología Mexicana, núm. 175, pp. 72-77.
