Oswaldo Gómez, Milan Kováč
Las antiguas ciudades mayas de Tikal y Uaxactún mantuvieron a lo largo de su historia buenas relaciones entre sí, posiblemente influidas por su relativa cercanía de tan sólo 19 km. Sin embargo, los avatares propios de cada asentamiento propiciaron, a lo largo del tiempo, diferencias considerables que determinaron una identidad propia.
En el origen, Uaxactún fue más importante que Tikal, como lo demuestran las obras arquitectónicas del Preclásico Tardío (400 a.C.-250 d.C.), entre las que sobresalen cuatro grupos triádicos, cuatro pirámides radiales, tres conjuntos astronómicos y un juego de pelota. Los palacios del llamado Grupo H, Norte y Sur, representan el auge artístico en la arquitectura y la escultura de las Tierras Bajas. Además, en el Grupo F se instaló un centro de poder denominado El Tiburón, con 32 m de altura y una base de 165 x 115 m, el edificio más grande del centro y noreste del Petén. La dinastía de Uaxactún fue fundada alrededor de 350 a.C., es decir 440 años antes que la de Tikal, fundada en 90 d.C. Sin embargo, en el Clásico (250-900 d.C.) Tikal predominó en toda la región y Uaxactún perdió su importancia política para siempre. Para 360 d.C. en Tikal hubo una sólida y próspera dinastía dirigida por el más venerado gobernante de la primera dinastía, Chak Tok Ich’aak I, promotor de las ciencias, la ideología y la construcción. Sin embargo, todo cambió dramáticamente en 378, cuando se registró “la entrada” de extranjeros procedentes del centro de México a la ciudad. Ese mismo día murió Chak Tok Ich’aak I junto con su familia, y surgió un nuevo orden en Tikal, dirigido por un militar de Teotihuacan llamado Sihyaj K’ahk’. Por estrategia, los invasores no se instalaron directamente al frente del gobierno de las ciudades sino que nombraron aliados locales. En Tikal, un niño de padre teotihuacano y madre tikaleña fue nombrado gobernante, tutelado por Sihyaj K’ahk’. Esta situación duró hasta aproximadamente el año 600, cuando Teotihuacan decae y es abandonada. Después de un hiato, Tikal empezó su auge ya sin influencia externa y se convirtió en el centro de población más poderoso del mundo maya.
La Ciudad Antigua de Uaxactún
En 2016 se cumple un centenario del descubrimiento de Uaxactún y del inicio de las investigaciones. Desde entonces el sitio ha sido investigado por arqueólogos y mayistas de renombre, entre ellos Frans Blom, Sylvanus G. Morley, Oliver Ricketson, Lediard Smith y Juan Antonio Valdés. A pesar de ello, hay grandes sectores del sitio sin investigar, especialmente del Preclásico. Un nuevo proyecto, dirigido por Milan Kováč, de la Comenius University en Bratislava, Eslovaquia, se propuso completar los estudios. Así, por octavo año consecutivo se han excavado las partes desconocidas que están complementando nuestro conocimiento sobre esa importante ciudad maya. Lo que descubrimos ahora es que la ciudad tuvo dos núcleos distintos: uno en el Preclásico, que llamamos Ciudad Antigua (en su mayor parte ya nunca reocupado), y otro llamado Ciudad Nueva, donde se realizó la mayoría de las primeras investigaciones. Según el nuevo desciframiento de la Estela 3 de Uaxactún, que realizó el epigrafista Dmitri Beliaev, el rey que erigió la estela se presentó como el sucesor número 33 de la dinastía de Wak Kab’ Ajaw. La estela fue erigida en 507 d.C. Si tomamos en cuenta el promedio de duración del reinado de los señores mayas, la dinastía debió haber sido fundada alrededor del año 350 a.C. por “El Señor de Sexta Tierra”. En vista de que las investigaciones actuales en Uaxactún se dedican más al Preclásico, nos centraremos en Ciudad Antigua: el centro de los herederos tempranos del rey-fundador.
Oswaldo Gómez. Arqueólogo por la Universidad de San Carlos de Guatemala. Investigador del Proyecto Atlas Arqueológico de Guatemala. Jefe de los Proyectos Templo I, Templo V y Plaza Siete Templos de Tikal. Coordinador de la Unidad Técnica del Parque Nacional Tikal. Administrador del Parque Arqueológico Quiriguá.
Milan Kováč. Doctor en historia de las religiones por la Universidad Comenio en Bratislava (UCB), Eslovaquia. Director de Departamento de Religiones Comparativas, UCB. Director del proyecto arqueológico regional Uaxactún, Instituto Eslovaco de Arqueología e Historia. Director del Centro de Estudios Mesoamericanos, UCB.
Gómez, Oswaldo, Milan Kováč, “Las relaciones entre Tikal y Uaxactún. Investigaciones actuales”, Arqueología Mexicana núm. 137, pp. 38-45.
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