Calakmul fue una de las ciudades más grandes del Clásico. Además de una extensa área urbana, de una buena cantidad de edificios de gran monumentalidad, de poseer el conjunto de estelas más abundante de la zona maya, los trabajos de exploración de los años recientes han traído a la luz un importante conjunto de vestigios de todo tipo. Entre ellos se encuentra un grupo de pinturas murales de notable manufactura y, en buena parte de los casos, en magnífico estado de conservación. Los murales localizados en 2001 en la acrópolis Norte de Calakmul se encuentran entre los mejores ejemplos conocidos del arte pictórico maya. Entre estos murales destaca uno en donde se ve a una mujer que lleva un fino vestido de gasa de color azul y que ayuda a otra mujer, quien sostiene una gran olla.
Tomado de, Arqueología Mexicana, Especial 44, Mundo maya. Esplendor de una cultura