El espacio arqueológico tarahumara
Los tarahumaras son un pueblo originario del norte de México, viven en el suroeste de Chihuahua en la Sierra Madre Occidental. De acuerdo con el registro arqueológico, la presencia tarahumara en la sierra se remonta al menos hacia el periodo Prehistórico, entre 700 y 900 d.C., pero es alrededor de 1250 d.C. cuando el pueblo tarahumara ya estaba bien asentado y distribuido en un territorio similar en extensión al que describieron los primeros cristianos que llegaron a su encuentro en el siglo XVI.
Desde la arqueología observamos que el patrón de asentamiento tarahumara constaba de espacios específicos: de residencia, simbólicos y mortuorios. Los espacios de residencia incluyen la casa, el área de trabajo y la parcela de cultivo. Los espacios simbólicos son aquellos que representan eventos de la vida y la cultura tarahumara.
Algunos de esos espacios son temporales, otros permanentes, ocultan secretos y pueden alcanzar el grado de sagrados; nos referimos a patios para ceremonias, lugares de cacería, lugares de agua, lugares de tránsito, lugares de recolección de plantas como el peyote, y cuevas y cerros con arte rupestre. Finalmente están los espacios mortuorios, destinados para albergar los cuerpos de los difuntos pero no las almas.
Un lugar para vivir, un lugar para morir
Un indicador arqueológico que permite distinguir a una cultura de otra es, por su singularidad, el tratamiento que le dan a sus muertos. Durante el periodo Prehistórico las costumbres funerarias tarahumaras consistían, primero que nada, en encontrar una cueva o covacha alejada de la vivienda, y posteriormente realizar el ritual de entierro y despedida del difunto.
Imagen: Cueva El Gigante. a) Cerro en el que se localiza este sitio arqueológico. b) Restos mortuorios tarahumaras localizados en un cementerio colectivo. Fotos: Enrique Chacón Soria.
Enrique Chacón Soria. Arqueólogo por la ENAH y maestrante por la EAHNM-CIESAS. Premio Alfonso Caso a la mejor tesis de arqueología en 2010. Adscrito al Centro INAH Chihuahua y titular de los proyectos arqueológicos “Samalayuca” y “Cueva de las Monas”. Especialista en arte rupestre y arqueología de la Sierra Tarahumara.
Chacón Soria, Enrique, “La muerte en el mundo tarahumara”, Arqueología Mexicana, núm. 175, pp. 34-39.
