184. Las chinampas de la cuenca de México

Las chinampas son una forma de cultivo en camellones que tienen la particularidad de estar rodeadas por agua, lo que les permite cultivarse de forma intensiva durante prácticamente todo el año. Este último aspecto las hace diferentes de otros tipos de cultivo en camellones que se ubican en zonas temporalmente inundadas y que suelen producir por un periodo más breve. Las chinampas no surgieron abruptamente durante el periodo Posclásico. En realidad son el legado de comunidades que han habitado el entorno lacustre desde hace mucho tiempo. Estudios recientes indican que, desde hace más de 6 000 años, las comunidades precerámicas del sur de la Cuenca de México habitaron de forma permanente antiguos islotes en el lago de Xochimilco, actualmente visibles como sutiles elevaciones, y en los cuales prepararon las superficies para su habitación con material lacustre, construyeron viviendas domésticas de planta cuadrada con materiales perecederos, y se alimentaron de recursos acuáticos que complementaron con plantas cultivadas como maíz, frijol y camote.

Tras la llegada de los españoles, las epidemias diezmaron estas poblaciones chinamperas y muchas de las parcelas fueron abandonadas y las comunidades reubicadas, pero las chinampas siguieron activas en zonas como Iztacalco, Iztapalapa y, obviamente, Xochimilco y Tláhuac, donde aún resisten al crecimiento urbano y al desinterés político. Así, las chinampas y su gente persisten hasta la actualidad por derecho propio.

CONTENIDO

Noticias. Grandes valores para el arqueólogo Raúl BarreraDoctorado Honoris Causa a Leonardo López Luján, Editorial, p. 7, Invitación de la ENAH. Víctor Acuña Alonzo, p. 7. Los gobernantes de Tlatelolco, Xavier Noguez, pp. 8-13. Coyoacán, entre volcanes y lagos. El territorio prehispánico y del siglo XVI, Jaime Antonio Abundis Canales, pp. 14-23. DosierLas chinampas de la Cuenca de México, pp. 24-25. Chinampas arqueológicas. Historia de una tecnología hidráulica, Guillermo Acosta Ochoa, Berenice Jiménez González y Eduardo Corona M., pp. 26-31. La gente de las chinampas y sus viviendas, Berenice Jiménez González, Eduardo Corona-M., Guillermo Acosta Ochoa, pp. 32-39. La tierra dentro del agua. Las chinampas desde la época prehispánica hasta nuestros días, Emily McClung de Tapia, Diana Martínez Yrízar, Carmen Cristina Adriano Morán, pp. 40-45. Postal. pp. 46-47. Las chinampas y canales de Ateponazco. Un barrio de México-Tenochtitlan, Raúl Barrera Rodríguez, pp. 48- 53. Postal. pp. 54-55. La ecología política del paisaje chinampero de Xaltocan, Christopher T. Morehart, pp. 56-59. Un modo de vida agrícola chinampero en sitios arqueológicos en el AIFA, Juan Carlos Equihua Manrique, Rubén Manzanilla López, pp. 60-63. Las comunidades chinamperas y la Escuela Chinampera, pp. 64-67. ¿Cuahxicalli o vasija que simula un tambor?, Javier Urcid, pp. 68-73. La lepra en la sociedad novohispana. Un caso identificado en Tlatelolco, Judith L. Ruiz González, Carlos Serrano Sánchez, Salvador Guilliem Arroyo, pp. 74-79. La escultura en piedra del Valle de Bravo y la región del río Cutzamala, Patricio Gutiérrez Ruano, pp. 80-85. Lugares sagrados de agua y rituales que en ellos se realizan, Alicia M. Barabas, pp. 86-87. ¿Otras imágenes de dragones?, Manuel A. Hermann Lejarazu, pp. 88-89. Tres décadas de la revista Arqueología Mexicana, Eduardo Matos Moctezuma, pp. 90-91.