¿Sabías que?...
• Huasca es una contracción del nombre original que fue Huascazaloya, o acaso más propiamente Cuachquetzaloya. Una palabra que tal vez signifique “donde se hacen mantas de algodón”.
• La población fue una dependencia del señorío de Atotonilco, que a su vez era tributario de la Triple Alianza.
• Su población predominante parece haber sido otomí.
• Después de la conquista, Atotonilco subsistió como pueblo de indios y conservó a Huascazaloya como una de las tres cabeceras que lo conformaron.
• En cierto momento, probablemente durante el siglo XVII, San Juan Bautista Huascazaloya se separó completamente y se constituyó como pueblo.
• Durante el siglo XVIII, en sus alrededores se situaron importantes haciendas de beneficio.
Puntos de interés
Templo de San Juan Bautista. Se sabe que el primer establecimiento fue obra de los agustinos hacia 1675. El que ahora se observa se levantó en 1870. En su interior se conserva una interesante colección de cuadros, algunos del siglo XVI, con escenas religiosas; fueron traídos desde España por Pedro Romero de Terreros.
Imagen: Hacienda de Santa María Regla, Huasca de Ocampo, ca. 1930. Foto: D.R. INAH / sinafo / FN, CAT. 599019. Hacienda de Santa María Regla, Huasca de Ocampo. Foto: © Duck Quesada.
Enrique Vela. Arqueólogo por la ENAH, editor. Desde hace 30 años trabaja en el ramo editorial. Editor de la revista Arqueología Mexicana.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Vela, Enrique, “Huasca”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 112, pp. 16-19.