La muerte de Motecuhzoma II. La historia y el mito

Motecuhzoma quiere ir al Cincalco, “la Casa del Maíz”

Entre las referencias que se pueden considerar históricas, ya que son el testimonio de los informantes de Sahagún, se relata que, como reacción mítico-religiosa a lo que estaba ocurriendo, Motecuhzoma había decidido morir en el sentido que tenía la muerte en el mundo indígena prehispánico, el cual difiere notablemente de la noción cristiana. Reunió a sus sacerdotes-hechiceros para preguntarles adónde podía ir. La respuesta fue la siguiente:

Ca vmmati in mjctlan, yoan tonatiuh ichan, yoan tlalocan yoan cincalco injc vmpatiz in campa ie vel motlanequjliz, “Se sabe de Mictlan, y de la Casa del Sol, y de Tlalocan y de Cincalco, hacia donde dirigirse; a (el lugar) donde desees” (Códice Florentino, lib. XII, cap. 9).

Entre estas opciones, Motecuhzoma escogió el Cincalco:

Auh ie vel vmpa motlanequjliaia, motlanequjli in cincalco: vel iuh machoc, vel iuh tepan motecac, “Y bien de hecho allá quería (ir), quiso (ir) al Cincalco. Se supo, se hizo saber a (toda) la gente” (ibid.).

Según esta misma fuente, no se pudo materializar el deseo del tlahtoani mexica, pero su afán de ir al Cincalco resulta algo críptico. La intención de desaparecer, manifiesta, podría no haber sido la de una cobarde huida en uno de los espaciotiempos de la muerte, sino una respuesta mitológicamente adecuada a los hechos, que consistía en este caso en seguir el modelo ejemplar que había establecido Huémac, responsable de la caída de Tula.

Patrick Johansson K. Doctor en letras por la Universidad de París (Sorbona). Investigador del Instituto de Investigaciones Históricas y profesor de literaturas prehispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras, ambos en la UNAM.

Johansson K., Patrick, “La muerte de Motecuhzoma II. La historia y el mito”, Arqueología Mexicana, núm. 165, pp. 72-79.