La Reina Roja. Templo XIII o de la Reina Roja, Palenque, Chiapas. A la señora Tzak-bu Ajaw se le llamo la Reina Roja por la gran cantidad de cinabrio (colorante mineral de intenso color rojo) que cubría su osamenta. A los lados del sarcófago yacían los restos de los que debieron ser sus acompañantes. El edificio fue concluido hacia 672, año en que falleció esa dignataria. Foto: Javier Hinojosa / Proyecto Palenque

Templo XIII o de la Reina Roja, Palenque, Chiapas.  Con la construcción del Templo XIII o Templo de la Reina Roja se cubrieron dos edificios más antiguos. En el nivel inferior se construyó una estructura funeraria de tres cuartos abovedados, divididos por muros anchos.Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces

Sarcófago. Templo XIII o de la Reina Roja, Palenque, Chiapas. En el cuarto central se encontró un sarcófago monolítico, cubierto por una lápida, con la osamenta de la señora Tz’ak-bu Ajaw, quien al morir tenía alrededor de 40 años. Su cuerpo fue ataviado con un ostentoso ajuar funerario. Éste constaba de una máscara, collares, orejeras, pulseras, tobilleras y una diadema, los cuales estaban conformados por más de mil piezas de jadeíta, malaquita y concha. Concha con figurilla femenina. Templo XIII o de la Reina Roja, Palenque, Chiapas. Dentro del sarcófago y junto al cráneo de la señora Tz’ak-bu Ajaw (la Reina Roja) se localizó una concha marina que contenía una estatuilla femenina labrada en roca caliza. La concha fue un símbolo de las aguas fecundadoras del mundo inferior, de la cavidad primigenia de la vida y, por ende, simbolizó el útero materno, el acuoso ámbito de la gestación humana. Es posible que se trate de la representación del personaje enterrado en el mundo subterráneo. Dibujo: Proyecto Palenque; Foto: Jorge Pérez de Lara / Raíces