Lámina 29
Con el nombre personal, el individuo ha pasado de una edad a otra, de una etapa a otra, y en cada uno de estos pasos se vinculan ceremonias que “hacen que el individuo pase de una situación determinada a otra situación igualmente determinada” (Van Gennep, 2008, p. 16). (Párrafo 2)
En la lámina 30, dos son los individuos que inician la perforación de la oreja: se trata del dios 9 Viento (a) y del anciano sacerdote 2 Perro (b), quien representa un tipo de modelo de la actividad sacerdotal por antonomasia.
En medio de una gran cantidad de ofrendas, cargas de leña, bultos sagrados y mantas ricamente tejidas y pintadas, los señores 9 Viento y 2 Perro se perforan mutuamente el lóbulo de la oreja con un punzón de hueso y se colocan una nueva insignia. Se trata, entonces, de un cambio de orejera, dejan una en forma de disco azul (quizá de turquesa) y cambian a una orejera que parece un tipo de algodón no hilado (Jansen, 1982, I, p. 168).
Con la perforación de la oreja y el cambio de “aretes” se otorga el sobrenombre. El dios 9 Viento agrega el nombre personal de Serpiente Coyote (c) y el dios 4 Serpiente lleva el nombre ahora de Yahui-Sol (d) (lámina 30). En la lámina 29, a pesar del deterioro es posible identificar al señor 12 Zopilote, Jaguar Nocturno/Águila Nocturna (a); o al dios 7 Movimiento Jaguar arriba de la Guerra (b).
Imagen: Códice Vindobonensis, Lám. 29. Foto: Austrian National Library. ANL / Vienna Collection of manuscripts and rare books, Cod. mexic. 1.
Manuel A. Hermann Lejarazu. Doctor en estudios mesoamericanos por la UNAM. Investigador en el CIESAS-D.F. Se especializa en el análisis de códices y documentos de la Mixteca, así como en historia prehispánica y colonial de la región. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.
Hermann Lejarazu, Manuel A., “Lámina 29”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 103, pp. 40-41.