El Palacio Rojo, un verdadero palacio

Ann Cyphers

El Palacio Rojo

En los trabajos del Proyecto Arqueológico San Lorenzo Tenochtitlán en el Grupo D, iniciados en 1992, no siempre se han encontrado evidencias que sustenten las interpretaciones de Michael Coe. Incluyeron la excavación extensiva para evaluar la deposición estratigráfica, el piso rojo, el contexto de la columna y la supuesta línea de monumentos. Era un lugar enigmático porque no se percibía una relación temática entre los monumentos.

A lo largo de seis temporadas de campo las investigaciones fueron aclarando la naturaleza del edificio con piso rojo. Se observó que el piso rojo continuaba al oeste, este, norte y sur, hasta llegar a dimensiones aproximadas de 46 por 66 m, con un área de 2 200 m cuadrados. Tenía anchos muros de tierra que dividían el espacio interior en cuartos.

Se halló la parte basal de la gran columna en su posición original, lo que demostró su función como soporte del techo de un enorme edificio construido con detalles arquitectónicos suntuosos. Poco a poco llegó a ser evidente que estábamos ante una residencia sumamente diferente de las viviendas del Preclásico de 20-30 m cuadrados que se conocían para el periodo 1600-1000 a.C.; era un verdadero palacio.

Fue una sorpresa cuando aparecieron otros tres monumentos adyacentes a la ubicación original de las siete esculturas reportadas por Coe. Así desapareció la “línea de monumentos”, porque no fue una disposición intencional hecha por los olmecas, más bien fue el producto de una excavación hecha de forma lineal.

El conjunto de esculturas, aunque no comparten formas e iconografía, tiene una característica en común: la rotura. La recuperación de desechos de talla de basalto, instrumentos para el labrado de escultura y bocetos confirmaron que allí se llevó a cabo el tallado de escultura a partir del reciclaje de obras previas.

Imagen: Izquierda: Excavación de dos cuartos en la parte occidental del Palacio Rojo: al fondo se ve el taller de escultura y en el frente el almacén. Derecha: Esculturas quebradas y mutiladas y desechos de talla en el Complejo del Palacio Rojo. Fotos: Ann Cyphers.

Ann Cyphers. Doctora en historia por la UNAM. Investigadora en el Instituto de Investigaciones Antropológicas, UNAM Especialista en el periodo Preclásico (Formativo) y, en particular, en la civilización olmeca.

Cyphers, Ann. “El Palacio Rojo”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 104, pp. 50-56.