El sol del primer amanecer

Manuel A. Hermann Lejarazu

Lámina 23

Al inicio de la lámina 24, el dios 9 Viento lleva cargando sobre su espalda a una mujer de cuya cabeza brotan tres hongos (a). Tanto Alfonso Caso (1963), como Furst (1978) coinciden que se trata de una personificación de los hongos bajo el nombre de 11 Lagartija.

La mujer es llevada a una gran reunión que preside el dios 7 Flor, de cuyos ojos brotan lágrimas (b). Frente a él, 9 Viento toca instrumentos y entona un canto (c), pues se observa el empleo de un omichicahuaztli y un cráneo como resonador (Sánchez, Ponce y Bellomia, 2018).

Varios dioses intervienen en la ceremonia, como 1 Muerte (d), la señora 1 Águila (e) y 9 Hierba (f). Un dios parece zambullirse en el río de Apoala (g) y lo mismo están por realizar otras dos deidades (h). Ya en la lámina 23 se levanta un gran disco solar que representa el primer amanecer, pero antes el Sol ha surgido sobre una meseta de arena (i).

Uno de los nombres calendáricos del Sol parece ser 1 Flor (j), signo que acompaña a la propia deidad que sujeta flechas y un lanzadardos (k). El mito huichol, por su parte, narra que los dioses salieron del mar e iniciaron un largo viaje para encontrar el Cerro del Amanecer. Una vez que llegaron allí, los dioses comieron el peyote y experimentaron una visión que coincide con la salida del Sol (Neurath, 2008).

Imagen: Códice Vindobonensis, Lám. 23. Foto: Austrian National Library. ANL / Vienna Collection of manuscripts and rare books, Cod. mexic. 1.

Manuel A. Hermann Lejarazu. Doctor en estudios mesoamericanos por la UNAM. Investigador en el CIESAS-D.F. Se especializa en el análisis de códices y documentos de la Mixteca, así como en historia prehispánica y colonial de la región. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores.

Hermann Lejarazu, Manuel A.,  “Lámina 23”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 103, pp. 46-47.