El Templo de la Cruz Foliada se encuentra en el sector noreste del sitio de Palenque, que en la antigüedad se conoció como Lakamha’, “lugar de las grandes aguas”, ciudad maya que se desarrolló durante el periodo Clásico (200-900 d.C) y que fue la sede del señorío de B’aakul, “lugar de la abundancia de huesos”, entre 490 y 800-850 d.C (De la Garza et al., 2012).
El Templo de la Cruz Foliada forma parte de una serie de tres edificaciones que se conocen como Grupo de las Cruces, junto con el Templo de la Cruz y el Templo del Sol. De acuerdo con las inscripciones que se encuentran en el interior de los templos, este conjunto fue construido por K’ihnich Kan B’ahlam, hijo de K’ihnich Janaab’ Pakal, entre 690 y el 692 d.C., momento en el que las tres divinidades patronas de Palenque- Lakamha’ entraron a sus respectivos altares para habitar sus casas: GI en el Templo de la Cruz, GII o Unen K’awiil en el Templo de la Cruz Foliada y GIII en el Templo del Sol (Stuart y Stuart, 2008).
La ubicación de los tres templos también está relacionada con la advocación de los dioses: el Templo de la Cruz, el más alto y ubicado al norte de la plaza, está asociado con el cielo y el cenit; el Templo de la Cruz Foliada, construido a una altura intermedia respecto a los otros dos templos, se ubica al este de la plaza y está asociado con la regeneración a través del ciclo vida-muerte-renacimiento; el Templo del Sol es el edificio más bajo del conjunto, que incluso desplanta por debajo del nivel general de la plaza, se ubica al oeste y está asociado con el inframundo y con el paso del Sol bajo la tierra (De la Garza et al., 2012).
Cabe destacar que el Templo de la Cruz Foliada fue construido aprovechando el relieve natural del terreno: fue adosado al cerro El Mirador, cuyo nombre antiguo era Yemal K’uk’ Lakam Witz o “Gran Montaña del Quetzal Descendente” de acuerdo con las inscripciones, mismo que alberga una cueva. Durante el solsticio de verano, el Sol sale exactamente tras el templo y se pone frente a él, asociándolo con el momento en que se re-inicia el ciclo agrícola con la siembra del maíz.
Imagen: Templo de la Cruz Foliada, Chiapas, al concluir los trabajos de estabilización de su basamento. Foto: © Rocío Hernández Juárez.
Alizé Lacoste Jeanson. Doctora en bioantropología, especializada en osteobiografía y arqueotanatología. Investigadora en el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM.
Rocío Hernández Juárez. Arqueóloga por la ENAH. Maestra en antropología por la UNAM.
Natalia Martínez Gutiérrez. Historiadora por la Universidad Rey Juan Carlos (Madrid). Cursa la maestría en historia en la UNAM, con la especialidad en representación iconográfica y epigráfica de mujeres en el área maya.
Luis Nuñez Enríquez. Doctor en antropología por la UNAM, especialista en prácticas mortuorias mesoamericanas. Investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM, donde realiza una investigación sobre las sepulturas de Palenque, Chiapas.
Arnoldo González Cruz. Arqueólogo por la ENAH. Investigador del Centro INAH Chiapas. Desde 1989 es director del Proyecto Arqueológico Palenque.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Lacoste Jeanson, Alizé et al., “Hallazgo de dos neonatos bajo la escalinata del Templo de la Cruz Foliada. Palenque-Lakamha’, Chiapas?”, Arqueología Mexicana, núm. 185, p. 82-87.