Por los caminos de Michoacán encontramos el municipio de Santiago Tingambato, poblado que se asienta al pie de monte del cerro Comburinos, donde hay grandes huertas de aguacate; asimismo, en los alrededores del sitio arqueológico de Tingambato se encuentran árboles de aguacate. “Tinganio” o las “Ruinas” son las formas coloquiales con que lo designan los pobladores de la región. El nombre de Tingambato probablemente deriva de tinganio, que en lengua purépecha significa “lugar donde termina el fuego”; quizás el locativo se origina por las condiciones geográficas del lugar, donde inicia la tierra fría y termina la tierra caliente; también puede interpretarse como “cerro de clima templado”.
Tomado de Laurie Melchor Cruz Hernández y Olga Lidia Landa Alarcón, “Tingambato. Un sitio del Occidente de México y una tumba real”, Arqueología Mexicana, núm. 123, pp. 43 - 47.