Buena muestra son las expediciones a Xochicalco emprendidas por José Antonio de Alzate y Ramírez (1737-1799). La primera, de 1777, arrojó como resultado los muy imperfectos dibujos topográficos y arquitectónicos que elaboró el propio polímata novohispano. Llama la atención la lámina donde representó a tinta y aguada dos fachadas del Edificio de las Serpientes Emplumadas, pues no dibujó allí sus conocidos relieves, sino que reprodujo glifos mexicas de la Matrícula de Tributos, tomados en forma arbitraria de la Historia de la Nueva España del cardenal Lorenzana.
En 1784, Alzate regresó a Xochicalco y, con espíritu autocrítico, se hizo acompañar de un artista de apellido Arana para subsanar el levantamiento iconográfico del mencionado edificio. Finalmente, Francisco Agüera y Bustamante –quien tuvo actividad entre 1784 y 1805 como grabador de estampas religiosas e ilustrador de exitosos libros como La portentosa vida de la muerte de Joaquín Bolaños– abrió las láminas en cobre de los mencionados dibujos de Alzate y Arana, las cuales ilustrarían la conocida memoria publicada como suplemento de la Gazeta de Literatura de México. Años después, en 1804, el jesuita expulso Pedro José Márquez (1741- 1820) recibió en Roma un ejemplar del suplemento y mandó rehacer sus estampas para su ensayo Due antichi monumenti di architettura messicana.
Imágenes: Relieve y reconstrucción hipotética del Edificio de las Serpientes Emplumadas, Xochicalco. Dibujos en tinta y aguada de Alzate (1777). Tozzer Library, Harvard University, Cambridge, Massachusetts.
Leonardo López Luján. Doctor en arqueología por la Universidad de París Nanterre y director del Proyecto Templo Mayor del INAH. Miembro de El Colegio Nacional.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
López Luján, Leonardo, “Periodo colonial. Nueva España y Guatemala (1521-1821)”, Arqueología Mexicana, Edición especial, núm. 99, pp. 30-77.