Lealtades y desavenencias entre la nobleza indígena durante la conquista de Tenochtitlan
La matanza en la fiesta de tóxcatl. El detonante de la Noche Triste
La fiesta de tóxcatl estaba relacionada con los preparativos previos a la fiesta de Huitzilopochtli. Las fuentes señalan que los españoles dieron el permiso para que se celebrara, siempre y cuando no se hiciera ningún sacrificio a los dioses, y aunque ése fue el acuerdo, Pedro de Alvarado dio la orden de matar a traición, acabando con la vida de varios caciques y principales.
Bernal Díaz del Castillo cuenta que cuando Cortés regresó a Tenochtitlan, trató de averiguar el motivo del ataque y Pedro de Alvarado lo justificó diciendo que ciertos principales le habían avisado que acabada la fiesta los iban a matar y él se adelantó. A Cortés no pareció convencerle la respuesta de Alvarado, sobre todo después de que los soldados del propio Alvarado le aseguraran que Moctezuma no estaba envuelto en esa supuesta conspiración. Un asunto que también podría ponerse en duda, pues en las crónicas de conquista se dice que Moctezuma, a través de emisarios, estuvo en contacto con Pánfilo de Narváez, que le informaba de sus planes de acabar con Cortés y dejarlo a él libre. Es decir, no se puede descartar que Moctezuma pudiera albergar cierta esperanza y tratara da aprovechar esta coyuntura. Sin embargo, como no fue así, volvió a retraerse. La cuestión es que la crueldad del episodio fue tal, que quedó registrada en varias fuentes indígenas y españolas, y también en algunas pictografías. De las fuentes se colige que Moctezuma y los que con él estaban bajo arresto no participaron de la fiesta y, por eso, todo parece indicar que la mayoría de los muertos pertenecía a la elite sacerdotal. En cualquier caso, la matanza de tóxcatl y la docilidad de Moctezuma, cuando Cortés le pidió salir a la terraza del palacio para calmar a su enfurecida población, fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del pueblo mexica. En ese momento se arrojó una piedra que golpeó la cabeza de Moctezuma y muy poco después murió.
María Castañeda de la Paz. Doctora en historia por la Universidad de Sevilla, España. Investigadora del IIA de la UNAM. Estudia la historia indígena prehispánica y colonial del Centro de México, y se especializa en la nobleza, la heráldica, la cartografía y los códices históricos indígenas.
Castañeda de la Paz, María, “Lealtades y desavenencias entre la nobleza indígena durante la conquista de Tenochtitlan”, Arqueología Mexicana, núm. 163, pp. 42-47.