Redescubriendo una escultura de pez de Xochicalco, Morelos
Desde las publicaciones más tempranas sobre Xochicalco es evidente la fascinación hacia la Pirámide de las Serpientes Emplumadas. De ahí que la primera intervención arqueológica realizada en el lugar se haya centrado en este edificio. Muchos de los bloques de piedra basáltica que alguna vez formaron parte de la estructura no pudieron incorporarse a su lugar original y fueron colocados en un costado, al sur del monumento. Al paso de los años y de las exploraciones, a este grupo de piedras esculpidas se le irían añadiendo muchas más, entre ellas la escultura del pez.
El pez
Al revisar imágenes históricas de Xochicalco resguardadas en la Fototeca Nacional del INAH, se hallaron tres fotografías del amontonamiento de los bloques basálticos y relieves de la Pirámide de las Serpientes Emplumada, entre las que se destaca un pez esculpido en piedra.
La escultura muestra una fractura a lo ancho de la pieza, entre las branquias y la aleta pectoral. Sólo se ha localizado un fragmento de la parte anterior de la escultura, el cual tiene una longitud máxima de 71 cm y una altura de 32 cm. Asimismo, se ha podido corroborar que la pieza tuvo una forma trapezoidal, con un ancho máximo de 42 cm, uno mínimo de 10 cm y un peso aproximado de 200 kg.
Entre las características morfológicas de la escultura destacan las escamas redondeadas de gran tamaño que van desde las branquias hasta la parte distal. En la zona de la cabeza se encuentran las aperturas branquiales formadas por líneas verticales en bajorrelieve, así como el ojo circular, bajo una línea que aparenta una ceja. Junto al hocico abierto hay líneas curvas que asemejan unas barbillas. En el extremo posterior se encuentra la aleta caudal de aparente forma redondeada, representada con líneas horizontales, también, en bajorrelieve. No se observan otras aletas, como la dorsal, la ventral y la anal, cuyo tamaño y rasgos pueden ser característicos de ciertos grupos.
La localización del pez permitió identificar que la escultura presenta grabados en ambas caras, con algunas diferencias. En el costado no visible de la fotografía original se observa, frente al ojo, una posible barbilla en posición vertical y una más horizontal. Las branquias y el ojo no muestran mayor diferencia; la aleta pectoral se encuentra mucho más deteriorada y se alcanzan a observar algunas escamas que no son tan notorias en el lado opuesto.
Imagen: Representación del pez procedente de Xochicalco, Morelos, ca. 1930. Foto: © 301351, Secretaría de Cultura, INAH, SINAFO, FN, México. Partes de la Pirámide de las Serpientes Emplumadas, Xochicalco, ca. 1930. Fotos: © 301380 Y 301408, Secretaría de Cultura, INAH, SINAFO, FN, México; Mosaico: Claudia Alvarado L.
Claudia I. Alvarado León. Doctora en estudios mesoamericanos por la UNAM. Colaboradora del Centro INAH Morelos.
Eduardo Corona-M. Doctor en paleontología por la Universidad Autónoma de Madrid y profesor investigador del Centro INAH Morelos. Miembro del SNI.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Alvarado León, Claudia I. Y Eduardo Corona-M, “Redescubriendo una escultura de pez de Xochicalco, Morelos”, Arqueología Mexicana, núm. 173, pp. 24-29.