Cosmos y comida
No era una región con una distribución uniforme de recursos, los cuales deben entenderse no solamente como materias primas y manufacturas sino también las tecnologías, los sistemas de transporte y comunicación y las poblaciones –sin duda los habitantes eran el recurso más importante.
Los efectos de la distribución desigual de recursos crearon especializaciones y exclusividades y también competencias.
Hace 4 000 años la poca población que ocupaba la costa sur del Golfo sufrió una gran sequía. Fue peor que las famosas sequías mayas del fin del periodo Clásico. Pequeños grupos de personas buscaban agua y alimentos a lo largo de la costa y se adentraron en diferentes lugares en busca de las mejores oportunidades económicas. Al parecer querían estar en medio de las llanuras, dentro de los humedales.
Probablemente revisaron y evaluaron muchas islas en las llanuras, así como las características de su entorno. En efecto, cualquier isla les podía dar seguridad durante las inundaciones. Sin embargo, no todas estaban rodeadas por ríos navegables y grandes humedales.
La búsqueda de algunas personas terminó en la cuenca baja del río Coatzacoalcos, en lo que llamamos la Isla de San Lorenzo. Esta isla se localiza al inicio de un gran sistema fluvial de forma dendrítica. Los pioneros debieron reconocer las oportunidades que aportaba su ubicación estratégica en relación con los recursos y las posibilidades de comunicación y transporte terrestre y acuático.
Imagen: Islote olmeca, de la llanura norte, durante la estación de estiaje. El terreno alto, que se observa al fondo, pertenece a la meseta de San Lorenzo. Inundación durante la estación de lluvias. Al fondo se aprecia San Lorenzo. Fotos: Ann Cyphers.
Ann Cyphers. Doctora en historia por la UNAM. Investigadora en el Instituto de Investigaciones Antropológicas, UNAM Especialista en el periodo Preclásico (Formativo) y, en particular, en la civilización olmeca.
Cyphers, Ann. “Cosmos y comida”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 104, pp. 16-23.