Textiles del Golfo de México

Enrique Vela et al.

Esta zona, caracterizada por sus variadas condiciones ambientales, es habitada por grupos nahuas, huastecos y totonacos. Estos dos últimos son los más numerosos y habitan en regiones claramente definidas: los huastecos en el área donde limitan los estados de San Luis Potosí y Veracruz; los totonacos ocupan el centro de este último estado. En la época prehispánica, la Huasteca era famosa por la calidad de sus textiles. Hoy en día, en varias poblaciones se elaboran quetchquémitls y otras prendas en telar de cintura. Entre los grupos totonacos la producción se hace con telar de cintura y de pedal, y se utilizan ampliamente manta y otras telas industriales. Si bien en varias de las localidades indígenas del Golfo de México se siguen portando las prendas tradicionales, una parte significativa de la producción textil consiste en piezas para otros fines, como cobijas y tapetes. Durante el siglo XIX se introdujo en la región el maguey henequenero, llamado localmente zapupe. La manera de obtener la fibra no difiere gran cosa de la practicada en otras partes, y se destina sobre todo a tejer morrales en telar de cintura. Para los morrales finos el zapupe se tiñe antes de tejerlo, y los comunes se estampan con toscos dibujos de flores. Los textiles huastecos y totonacos van decorados con motivos que incluyen sobre todo flores y otros elementos vegetales.

 

Enrique Vela. Arqueólogo por la ENAH, editor, desde hace 30 años trabaja en el ramo editorial.

Vela, Enrique, “Golfo de México”, Arqueología Mexicana, edición especial núm. 55, pp. 54-57.