En 1987, la arqueóloga Guadalupe de la Peña Virchez, de la entonces Subdirección de Salvamento Arqueológico, llevó a cabo la investigación y salvaguarda del patrimonio arqueológico en riesgo de afectación por los trabajos de remodelación que la Sedue realizaba en el Antiguo Palacio del Arzobispado, hoy Museo de Arte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, ubicado en la calle de Moneda núm. 4, en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Esta intervención permitió identificar el muro en talud del primer cuerpo arquitectónico del Templo de Tezcatlipoca por sus lados norte y este. Los sondeos arqueológicos permitieron el hallazgo el 1 de julio de 1988, en el patio anexo debajo de una fuente ovalada, de un monolito circular que contiene diseños en bajorrelieve de 2.24 m de diámetro y una altura de entre 64 y 76 cm. Hoy sabemos que esta pieza, que actualmente se exhibe en la Sala Mexica del Museo Nacional de Antropología, es un temalácatl, escultura pintada de rojo que en su parte superior, al centro, presenta labrada una deidad solar. En su canto se ven 11 escenas de conquistas de Moctezuma Ilhuicamina. Presenta una oquedad en el centro, donde parece haber estado una argolla a la que se ataba a los prisioneros que debían combatir contra guerreros mexicas. Se sabe por las fuentes históricas que el sacrificio gladiatorio se efectuaba en honor de Xipe, el Tezcatlipoca Rojo. De ahí, las constantes alusiones a esta deidad representadas en el monolito del Antiguo Palacio del Arzobispado (Matos, 1999, pp. 77-78).
Raúl Barrera Rodríguez. Investigador de la Dirección de Salvamento Arqueológico, INAH. Supervisor del Programa de Arqueología Urbana, Museo del Templo Mayor.
Barrera Rodríguez, Raúl, “Antiguo Palacio del Arzobispado Vestigios prehispánicos y virreinales”, Arqueología Mexicana, edición especial, núm. 79, pp. 66-72.