El área cívico-religiosa de la ciudad se localiza en la Plaza de la Estela de los Dos Glifos, a la que podían llegar todos los visitantes de Xochicalco y donde se encuentra la Gran Pirámide, la estructura de mayores dimensiones y, por tanto, la más importante de la ciudad. Este edificio está formado por una terraza de tres cuerpos sobre la que se localizó una pequeña escalera en el lado oeste; se cree que, por simetría, debió haber una en el lado este, aunque no se localizó. Sobre la terraza descansa el basamento de cuatro cuerpos que al mismo tiempo sostiene el templo: un gran cuarto con muros anchos de adobe y dos pilares en la fachada. Tanto la terraza como el basamento están decorados con el estilo arquitectónico que caracteriza a Xochicalco: un muro en talud sobre el que se ubica el paramento con una decoración de entrantes y salientes, rematado a su vez con otro paramento. La proporción entre los tres cuerpos que conforman el perfil arquitectónico varía entre los edificios, aunque por lo general el talud suele ser de mayores dimensiones y ambos paramentos tienen la misma altura.

La escalinata central de la Gran Pirámide estaba flanqueada por alfardas que posiblemente estaban decoradas con cornisas que se encontraban a la altura del segundo paramento, lo que ayudaba al ajuste de inclinación de la escalera y la alfarda. Esta última estaba rematada con un dado cuyos bordes sobresalían y formaban una cavidad decorada con una serie de clavos de piedra dispuestos en forma simétrica, de los que se tienen numerosos ejemplos.

Tomado de Silvia Garza Tarazona, Claudia I. Alvarado León, Alberto Gutiérrez Limón, “Xochicalco, Morelos. La reconstrucción arqueológica en papel”, Arqueología Mexicana núm. 98, pp. 24-31.

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