La Chalchiuhtlicue de Tlatelolco

Leonardo López Luján et al.

La Chalchiuhtlicue de Tlatelolco, Dupaix y Humboldt

Una obra maestra

Si consultamos la base de datos del Museo Británico, el número de inventario Am,St.373 nos conducirá a una talla en andesita violácea de poco más de 500 años de antigüedad y que está adscrita a la civilización mexica. No es demasiado voluminosa, a juzgar por sus medidas: 37 cm de alto, 19.5 de ancho y 20 cm de espesor. Representa de cuerpo completo a una joven mujer, sentada plácidamente sobre sus espinillas y siguiendo una estricta simetría bilateral.

Luce sobre su cabeza un complejo tocado que nos brinda las claves para descifrar la advocación de la divinidad. Se trata de una suerte de bonete cilíndrico, liso en la cara superior, pero decorado en sus flancos por la superposición de cinco bandas horizontales: una superior de placas rectangulares, tres intermedias lisas y una inferior de elementos esféricos. El bonete está flanqueado por dos borlas prominentes, cuyos hilos penden formando sendos conos truncados. Este tocado se amarra a la nuca por medio de dos cordeles, rematados también por borlas y que caen lánguidos apoyándose en una estola rectangular segmentada en bandas verticales. En la parte posterior, el tocado se complementa con un adorno de papel plisado (amacuexpalli).

El rostro inexpresivo de la mujer refleja el ethos mexica de la templanza. Posee ojos elípticos, nariz ancha, pómulos ligeramente marcados, boca entreabierta y un faltante en la barbilla producto de un viejo impacto. El torso está cubierto con un quechquémitl llano, aunque rematado con una franja recta y numerosas borlitas. De esta prenda emergen, por los lados, dos brazos que se flexionan hacia el frente para descansar sobre los muslos. Las manos nos muestran su dorso y sus uñas, con pulgares apenas doblados. De la cintura a los tobillos viste un cuéitl o enredo que también es liso. En la cara posterior, abajo, el escultor dio una graciosa forma a las plantas de los pies: los dos están descalzos y sus respectivos dedos se enfrentan y se tocan.

 

Leonardo López Luján. Doctor en arqueología por la Universidad de París Nanterre y director del Proyecto Templo Mayor del INAH.

Foni Le Brun-Ricalens. Doctor en arqueología por la Universidad de París Nanterre y director del Centro Nacional de Investigación Arqueológica (CNRA) de Luxemburgo.

Claude Wey. Maestro en historia por la Universidad de París Panthéon-Sorbonne y colaborador científico del CNRA y del Museo Nacional de Historia Natural de Luxemburgo.

López Luján, Leonardo et al., “La Chalchiuhtlicue de Tlatelolco, Dupaix y Humboldt”, Arqueología Mexicana, núm. 164, pp. 19-23.