La casa real de Tenochtitlan
Moctezuma Xocoyotzin antes de la llegada de los españoles. Primera parte
Moctezuma Xocoyotzin ascendió al trono en 1502, tras la muerte de su tío Ahuítzotl. Lo anterior viene a mostrar que, por alguna razón, una vez cumplida la rotación de ese sistema de sucesión colateral impuesto por Itzcóatl, en el que el trono de Tenochtitlan debía pasar de un hermano a otro (Axayácatl, Tízoc y Ahuítzotl), la sucesión debía recaer sobre los miembros del linaje de Axayácatl. En este caso sobre Moctezuma Xocoyotzin, cuyo nombre viene expresado en los códices a través de los atributos de poder: la diadema de turquesa (xihuitzolli), a veces acompañada de una nariguera y una orejera.
Axayácatl fue el padre de Moctezuma Xocoyotzin, pero desconocemos la identidad de la madre. Tan sólo el cronista Chimalpahin asegura que era la misma que la de su hermano Cuitlahua, de lo que se inferiría que era una mujer originaria de Itztapalapa. De las fuentes se concluye que el recién estrenado tlatoani era una persona de profundas convicciones religiosas y un gran guerrero. Por su parte, el conquistador Francisco de Aguilar lo describió como astuto, sagaz, prudente, sabio, experto y muy determinado, aunque algo “aspero en el hablar”.
Los rituales de entronización del nuevo tlatoani duraron varios días y, durante los mismos, los sacerdotes le perforaron el labio, la nariz y las orejas, donde le colocaron piedras preciosas, acordes con su estatus. A continuación, lo vistieron con un maxtle y una tilma preciosa, lo calzaron con sandalias de turquesa y lo coronaron con una xihuitzolli de oro. Otro día le pintaron la cara y el cuerpo de negro, en calidad de sacerdote, y al final de la ceremonia se llevó a cabo el ritual de motlatocapaca (“lavarse como señor”) para validar su cargo. Es decir, tuvo que ir a la guerra a capturar prisioneros para sacrificarlos en la ceremonia pública de su coronación. Las provincias que para ello conquistó Moctezuma fueron Nopallan e Icpactépec, en el sur; sin embargo, a lo largo de su reinado emprendió campañas en todas las direcciones, bajo la premisa de consolidar las fronteras que había establecido su antecesor. La provincia de Tlaxcala también estuvo en su punto de mira y hacia allí dirigió varias campañas con el fin de aislarla.
María Castañeda de la Paz. Doctora en historia por la Universidad de Sevilla, España. Investigadora del IIA de la UNAM. Estudia la historia indígena prehispánica y colonial del Centro de México, y se especializa en la nobleza, la heráldica, la cartografía y los códices históricos indígenas.
Castañeda de la Paz, María, “Moctezuma Xocoyotzin antes de la llegada de los españoles. Primera parte”, Arqueología Mexicana, núm. 151, pp. 16-17.
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