La fauna en Xochicalco. Características biogeográficas y culturales
Se procesaron dos modelos con base en la identificación de los organismos y la distribución espacial en el sitio. El otro modelo nos permitió definir si había organismos específicos para ciertas zonas. Se obtuvieron cuatro grupos. El primero se integra con el jabalí (Pecari tajacu), el jaguar (Panthera onca), el gato montés (Lynx rufus) y el cocodrilo de río (Crocodylus acutus), todos localizados en los niveles más altos de la ciudad, como la Acrópolis, el Observatorio y unidades las B y C.
Esto sugiere que eran animales de lujo, los más apreciados por la elite, y que se utilizaban también en lugares ceremoniales. Esta apreciación se refuerza pues prácticamente todos los restos de estos sectores muestran marcas culturales para producir piezas de adorno o en ofrendas. A excepción del gato montés, todos los demás animales son neotropicales, lo que sugiere una preferencia por animales de cierta afinidad biogeográfica, que no provenían de poblaciones abundantes ni podían ser considerados un recurso de fácil disponibilidad ya que ello implica el transporte a larga distancia, lo que eleva su valor social.
Aunque originalmente el concepto de lujo en los animales se aplica a las actividades alimentarias, éste puede extenderse a otros usos como los aquí sugeridos, ya que permite entender la adquisición de organismos, sea por ostentación, por su disponibilidad limitada o su dificultad de acceso.
El segundo grupo lo componen el perro, el venado cola blanca y el puma, con presencia en prácticamente todos los sectores analizados. Estos animales tienen una amplia distribución (grupo W) y fueron los más abundantes en restos, lo que sugiere una mayor disponibilidad en el área circundante y probablemente sea la razón de su uso por todos los estratos sociales.
En el caso del venado cola blanca es conocida su gran importancia como alimento o materia prima entre las culturas mesoamericanas, y Xochicalco no fue la excepción. Si bien el puma es notable, seguramente al igual que los otros felinos identificados no fue fácil de cazar; sin embargo, podría estar más disponible en las áreas circundantes. Asimismo, podría estar relacionado con los atributos simbólicos de este animal en las esculturas y piedras grabadas encontradas en Xochicalco.
Imagen: Identificación y distribución de la fauna de Xochicalco. Información: Corona-M., 2008, y Melgar Tísoc, 2007 Puma. Xochicalco, Morelos. Foto: Ignacio Guevara / CNME / INAH.
Iguana hallada en la Gran Plataforma, cerca del Observatorio, de Xochicalco. Foto: Adalberto Ríos.
Eduardo Corona-M. Doctor en paleontología por la Universidad Autónoma de Madrid (España) y profesor investigador del Centro INAH Morelos. Miembro del SNI-Conacyt. Sus principales proyectos y publicaciones se relacionan con las interacciones humano-fauna en el Cuaternario y en particular con la domesticación animal en Mesoamérica.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Corona-M., Eduardo, “La fauna en Xochicalco. Características biogeográficas y culturales”, Arqueología Mexicana, núm. 179, pp. 60-65.