a Karl Taube
Las imágenes de Huitzilopochtli en el Templo Mayor de Tenochtitlan. Nuevos descubrimientos, nuevas ideas
El patrón binario de la pirámide
El Templo Mayor de Tenochtitlan celebraba a las dos máximas divinidades del estado mexica: por un lado, a Huitzilopochtli –numen de la guerra y el Sol– y, por el otro, a Tláloc –señor de la lluvia y de la tierra. Sus majestuosas imágenes pétreas eran propiciadas en las dos capillas que coronaban esta pirámide de 45 m de altura. La capilla del sur correspondía al ámbito simbólico de Huitzilopochtli, vinculado con la temporada de secas, el solsticio de invierno, la vida, el cielo, el día, la astralidad, el fuego, el calor, lo maduro y el color ocre.
En cambio, la capilla norte pertenecía al mundo de Tláloc, asociado a la temporada de lluvias, el solsticio de verano, la muerte, la tierra, la noche, la vegetación, el agua, el frío, lo tierno y el color azul.
Este patrón binario, debemos subrayarlo, no estaba perfectamente balanceado. Existía una clara preeminencia de Huitzilopochtli sobre Tláloc. Por ejemplo, la capilla del primero era de mayores dimensiones, como se observa en los códices Aubin, Durán, Telleriano-Remensis, Vaticano A y en los Primeros Memoriales.
Además, los colaboradores de fray Bernardino de Sahagún precisan en lengua náhuatl que era el equivalente a unos 2.5 m más alta que la de Tláloc. La capilla de Huitzilopochtli también tenía una mayor jerarquía en la traza de la ciudad. Anthony Aveni y asociados advirtieron que el eje oriente-poniente del recinto sagrado no pasaba entre las dos capillas, sino por el centro de la de Huitzilopochtli. A esto se suma que, en muchos documentos históricos, la pirámide entera no era llamada Templo Mayor sino “Templo de Huitzilopochtli”, soslayándose así su componente pluvial.
Imagen: En varias pictografías la capilla de Huitzilopochtli se representa más grande que la de Tláloc. Izquierda: Códice Durán, v. 2, p. 135. Derecha: Códice Telleriano-Remensis, f. 39r (por error, el tlacuilo dibujó la pirámide a espejo). Fotos: Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.
Leonardo López Luján. Doctor en arqueología por la Universidad de París Nanterre y director del Proyecto Templo Mayor del INAH. Miembro de El Colegio Nacional.
Alejandra Aguirre Molina. Doctora en estudios mesoamericanos por la Universidad Nacional Autónoma de México. Miembro del Proyecto Templo Mayor del INAH.
Antonio Marín Calvo. Pasante de la licenciatura en arqueología por la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Miembro del Proyecto Templo Mayor del INAH.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
López Luján, Leonardo et al., “Las imágenes de Huitzilopochtli en el Templo Mayor de Tenochtitlan. Nuevos descubrimientos, nuevas ideas”, Arqueología Mexicana, núm. 177, pp. 22-33.