Sistemas y materiales constructivos
Siguiendo la tradición constructiva mesoamericana, se edificó en primera instancia un gran basamento o plataforma que proporcionara una superficie nivelada, debido a que el terreno presenta una pendiente gradual hacia el sur.
Sobre este basamento se edificó el salón con un espacio interior de 40 por 36 m, lo que equivale a 1 480 m cuadrados, delimitado por muros perimetrales de 2.50 a 2.80 m de grosor. Actualmente esos muros se alzan a una altura que oscila entre 3 y 6 m, y los forman lajas de riolita unida con arcilla y fibras vegetales. Sin duda alguna los aparejos formados por las lajas se entrecruzaban a manera de retícula para lograr su estabilidad y grosor.
En el interior del salón se elevan 11 columnas de mampostería que servían de apoyo aislado para sostener la techumbre. Estas columnas muestran una altura homogénea entre ellas, de 6 m aproximadamente, y 1.90 m de diámetro. En cambio, otras dos columnas interiores llegan escasamente a 40 cm de altura, localizadas frente al acceso principal y en distribución simétrica con el resto de las columnas. En cambio, otro arranque de columna hacia la parte sur y próxima al acceso rompe la simetría, por lo que se le ha considerado un refuerzo para atender algún problema estructural (Jiménez, 2010, p. 31). En el acceso aparecen otras dos columnas de igual diámetro que las interiores, pero a una altura de 1.30 m. Al parecer esas columnas perdieron su altura original debido al saqueo.
Carlos Alberto Torreblanca Padilla. Arqueólogo por la ENAH, maestro en humanidades por la UAZ, investigador del INAH Zacatecas. Director de la zona arqueológica de La Quemada, Zacatecas.
Manuel Dueñas García. Maestro en estudios latinoamericanos por la Universidad Autónoma de S.L.P. Estudia la arqueología del noroccidente mexicano y la frontera norte de Mesoamérica.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Torreblanca Padilla, Carlos Alberto y Manuel de Jesús Dueñas García, “construcción del Salón de las Columnas de La Quemada, Zacatecas”, Arqueología Mexicana, núm. 162, pp. 28-33.