El INAH (Instituto Nacional de Antropología e Historia) y la Conabio (Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad) han desarrollado una estrategia de comunicación cuyo eje rector es el concepto de patrimonio biocultural. Esta estrategia aprovecha las fortalezas de cada institución.
Así, por un lado, la Conabio investiga, conserva, protege y difunde el patrimonio natural, para lo cual cuenta con una gran plataforma que le permite identificar especies naturales por medio de un importante manejo de redes sociales, y, por otro lado, el INAH tiene como tareas sustantivas la investigación, la conservación, la divulgación y la protección del patrimonio cultural con la participación de las comunidades en toda la República Mexicana.
Ambas instituciones tienen ahora como misión promover el conocimiento del patrimonio biocultural, para crear y fortalecer conciencia de su existencia y de la importancia de su conservación, recuperación y uso sostenible.
El trabajo conjunto entre estas instituciones llevó a la reflexión en torno a las interacciones entre estos dos ámbitos que, de suyo y a lo largo del tiempo, se encuentran presentes y han configurado distintos espacios, prácticas y evidencias de la cultura material que se exponen en esta revista.
Centrar la atención en la interacción entre la diversidad cultural y la biodiversidad requiere del diálogo entre disciplinas y experiencias en distintos campos del conocimiento. La configuración del paisaje es evidencia de la interacción entre quienes han habitado y transformado esos espacios y la manera en la que su flora, fauna y aguas han constituido un espacio transformado y articulado por prácticas, conocimientos y concepciones de sus habitantes; es, también, un sustento de memoria compartida.
Imagen: Izquierda: Vista hacia la Cañada de los Diablitos, Malinalco. Derecha: Saiba amarilla (Ficus petiolaris). Pinturas rupestres. Los Diablitos, Malinalco. Fotos: Jorge Martínez Herrera.
Aída Castilleja González. Investigadora del Centro INAH Michoacán. Antropóloga física y doctora en antropología social por la ENAH; maestra en antropología social por El Colegio de Michoacán. Principales líneas de investigación: estudios regionales de pueblos indígenas; concepciones sobre el tiempo y el espacio en pueblos de tradición purépecha; conceptos y prácticas en torno al patrimonio cultural.
María del Carmen Castro Barrera. Licenciatura en Restauración de Bienes Muebles en la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía “Manuel del Castillo Negrete” y maestría en humanismo y culturas por el Instituto Cultural Helénico. Restauradora perito de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH. Coordinadora Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
Castilleja González, Aída y María del Carmen Castro Barrera, “Malinalco y su patrimonio biocultural”, Arqueología Mexicana, núm. 177, pp. 34-37.