Las descripciones más prolijas sobre sacrificio de españoles corresponden a las últimas batallas que libraron los mexicas en contra de las huestes de Cortés. En especial, destaca el tema concerniente al consumo ritual de la carne de los peninsulares.
Díaz del Castillo (2017, p. 148), por un lado, menciona que en diversas batallas que se libraron en territorio mesoamericano, sus adversarios indígenas tenían siempre preparadas las ollas en las que cocinarían sus cuerpos, acompañados de chile. En otros casos se describe el desprecio a la carne de los españoles. Al menos, esto lo podemos ver por las amenazas que lanzaban los mexicas para que el tlatoani fuera liberado de su cautiverio:
“…no sois buenos de comer; que el otro día lo probamos y amargáis; mas echarvos hemos a las águilas, leones, tigres y culebras, que os traguen por nosotros; pero con todo esto, si no soltáis a Moteczumacin y os vais luego, presto seréis muertos santamente, cocidos con chilmolli y comidos de brutos animales, pues no sois buenos para estómagos de hombres…” (López de Gómara, 1988, p. 149).
Otro ejemplo lo hallamos después de la conocida Noche Triste, donde se llevó a cabo un contrataque con bergantines y grandes tropas por el lago y calzadas, respectivamente. Pese a este asedio y a los limitados recursos, los mexicas no dejaban de librar batallas y obtener victorias efímeras. Diversos cronistas relatan un episodio en el cual los tenochcas y tlatelolcas lograron apresar a un considerable número de españoles.
Karina López Hernández. Estudió arqueología en la Escuela Nacional de Antropología e Historia. Forma parte del Proyecto Templo Mayor desde 2015.
Esta publicación puede ser citada completa o en partes, siempre y cuando se consigne la fuente de la forma siguiente:
López Hernández, Karina, “El sacrificio de españoles en tiempos de la conquista”, Arqueología Mexicana, núm. 164, pp. 64-71.