Pintados de rojo. Prácticas funerarias de los primeros agricultores del desierto de Sonora
El tratamiento mortuorio
Los patrones mortuorios son muy variables como resultado de la larga ocupación del sitio, así como de un ritual mortuorio al parecer bastante flexible. Casi todos los entierros recuperados del periodo Agricultura Temprana son inhumaciones primarias en posición flexionada, pero también se han recuperado entierros semiflexionados y extendidos, así como inhumaciones secundarias y entierros múltiples. Un alto porcentaje ha sido encontrado en posición flexionada (46%), algunos de ellos hiperflexionados y en menor cantidad extendidos (7.8%); dos estaban sentados (0.7%) y de 112 no se tienen datos sobre la posición (44%) debido a las severas condiciones de erosión, fragmentación y dispersión de los huesos.
Los ajuares mortuorios son bastante limitados, y se presentaron en alrededor de 12% de la muestra. Consisten en cuentas y pendientes de conchas marinas (muchas de ellas nacaradas), lítica pulida, una pipa de piedra, cristales de cuarzo, huesos de venado y tortuga, así como algunas herramientas de cestería elaboradas huesos de animales. La abundante presencia de ornamentos de conchas marinas procedentes de las costas del Golfo de California (situado aproximadamente a 100 km al oeste del sitio), aunque pudieran considerarse como materiales no locales, permiten proponer su acceso no restringido como materia prima y la facilidad de una obtención directa; la mayoría de los objetos estuvieron asociados con adultos, aunque en tres inhumaciones de infantes había objetos de concha, y un joven estaba acompañado por un collar doble de 288 pequeñas cuentas discoidales de distintas especies. Otros objetos de concha que aparecen asociados con las inhumaciones de La Playa son caracoles Olivella u Olivas sin modificar, delgadas cuentas nacaradas en forma de gota, circulares y cuadrangulares con las orillas ribeteadas, asociadas tanto con inhumaciones femeninas como masculinas y en distintos grupos de edad. Lo que resulta un poco sorprendente es que a pesar de la enorme cantidad de desechos y fragmentos de aros de Glycymeris recuperados en el sitio, estos ornamentos de concha no han sido recuperados en asociación con ninguna inhumación.
Elisa Villalpando. Investigadora de la Sección de Arqueología del Centro INAH Sonora, codirectora del Proyecto La Playa.
James T. Watson. Curador asociado de bioarqueología, director asociado y profesor Asociado de Antropología del Museo Estatal de Arizona, Universidad de Arizona.
Villalpando, Elisa y James T. Watson, “Pintados de rojo. Prácticas funerarias de los primeros agricultores del desierto de Sonora ”, Arqueología Mexicana, núm. 154, pp. 56-62.
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