Nombres: Teotleco, teteo eco, “llegada de los dioses”, el dios llega”; pachtontli, “pequeño heno”. Deidades asociadas a los ritos: Tezcatlipoca, Huitzilopochtli, Huehuetéotl, Yacatecuhtli, Ometochtli.
Ritos principales
En esta veintena los ritos principales se enfocaban en dos aspectos: la llegada de los dioses a la tierra y la celebración de Huehueteótl, “dios viejo”, el dios del fuego terrestre. En los últimos días de la veintena se esperaba la llegada de los dioses; en el decimonoveno día se colocaba, en un templo, harina de maíz sobre un petate. Un sacerdote acudía cada tanto a revisarlo, cuando encontraba la huella de un pie sobre la harina, avisaba que los dioses habían llegado, entonces se tocaban instrumentos de viento y el pueblo ofrecía bolas de masa de maíz. El primer dios en llegar era Tezcatlipoca y los últimos en llegar eran Yacatecuhtli, el dios de los mercaderes y viajeros, que venía de lejos, y Xiuhtecuhtli, dios del fuego, quien no podía desplazarse rápidamente por su edad. Después de la llegada de los dioses se realizaba un rito en el que prisioneros de guerra, con el cuerpo pintado con franjas de colores – lo que indicaba que representaban a los mimixcoa–, eran echados vivos a una hoguera y eran sacados antes de que murieran, para extraerles el corazón y decapitarlos. Tras su sacrificio, estos mimixcoa se convertían en estrellas. Otros ritos de esta veintena tenían como elemento central el pulque y a Ometochtli, “dos conejo”, uno de los dioses de esa bebida.
Enrique Vela. Arqueólogo por la ENAH, editor, desde hace 30 años trabaja en el ramo editorial.
Vela, Enrique, “Veintena 12: Teotleco (4-23 de octubre)”, Arqueología Mexicana, edición especial núm. 59, pp. 71-72.