Christopher S. Beekman y Verenice Y. Heredia Espinoza
Los centros ceremoniales en toda esa región incluyen juegos de pelota y templos circulares distintivos, los cuales aparecen frecuentemente después de 100 a.C.
Para lograr piezas de tanta maestría como una mandíbula de Cacaxtla tuvieron que pasar varios miles de años, en los que se perfeccionaron las técnicas de trabajo con huesos humanos.
Fuerte y ágil, con un agudo sentido del olfato y afiladas garras, se convirtió en parangón de las virtudes masculinas, identificado con cazadores y guerreros y, por analogía, con la guerra y el sacrificio.
Las exploraciones llevadas a cabo en los sitios de Chalchihuites, La Quemada y sus zonas circundantes permitirá dar respuesta a varias interrogantes fundamentales de la historia antigua de México.
El ego alterno que entre los mixtecas tuvo el título de yahui, y entre los nahuas el de xiuhcóatl, representó en el contexto del juego de la pelota al nagual de muchos gobernantes antiguos.
Se ha reportado la presencia de perros en variados contextos arqueológicos con una profundidad temporal que se remonta, por lo menos, al Preclásico Medio.