La utilización de la imagen del águila sobre el nopal en el escudo nacional, tejió alrededor de él una noción de identidad, una idea de esa planta como sostén de nuestra nacionalidad.
La escena muestra el momento en que la señora K’ab’al Xook entrega un tocado, con forma de cabeza de jaguar y un escudo flexible a Itzamnaaj B’alam II gobernante de Yaxchilán.