El Sol Jaguar del Inframundo, fue la entidad patrona de la guerra. En este tablero se le representó precisamente como la forma animada de las insignias bélicas.
Llevó a los ejércitos mexicas más allá del Altiplano Central y obtuvo para su pueblo una extraordinaria fuente de productos de toda clase, sobre los que se sustentó el esplendor de Tenochtitlan.