Los juegos de pelota pueden encontrarse solos, asociados a basamento, pirámide o plataforma y asociados a pirámide con una o dos plazas.

Durante mucho tiempo ha persistido la idea de que el juego de pelota en Teotihuacan no se practicaba en canchas cerradas, como las que existían en otros sitios contemporáneos.

Los recorridos y las excavaciones han permitido entender mejor el papel del juego de pelota en el centro de Veracruz y cómo fue transformándose.

Estos grupos tenían un patrón de construcción específico al momento de edificar sus ciudades, y daban especial atención a la construcción de las canchas del juego de pelota.

En Michoacán, en Guerrero, en la Huasteca o en la región de Puebla-Tlaxcala, gracias a las investigaciones se ha logrado la identificación de numerosas canchas.

Existen algunas plazas abiertas con una, dos y hasta tres estructuras elevadas en sus extremos.

De la Unidad Central conocemos sólo cinco canchas, entre ellas las más antiguas, y en la Unidad Norte sólo se han podido observar tres canchas.

El Códice Xólotl presenta en su lámina 8 varias escenas sobre la muerte de Tezozómoc, sus funerales en Azcapotzalco e intrigas políticas en Tenochtitlan de Chimalpopoca con Tayatzin.

El combate fingido estaba arreglado, era simulado, simbólico y no terminaba en sacrificio alguno.

Se esbozan aquí algunas interpretaciones del papel o del simbolismo de las representaciones arquitectónicas bi y tri-dimensionales en Mesoamérica del juego de pelota.

Las fuentes nos dan a conocer la forma de los campos de juego y el hecho de que todas las ciudades tenían sus canchas, por lo general en forma de I.

Los monumentos presentan información novedosa sobre la relación de Uxul con la cercana urbe de Calakmul y los gobernantes de la dinastía Kaan.

El autor sugiere que la función esencial del juego de balón con bastones era seleccionar a las víctimas para los sacrificios.

No hay datos que permitan aseverar esto; por el contrario, existen ciertas evidencias que permiten negarlo. 

Posiblemente haya sido elaborada en la zona de Tajín, pues se ve un personaje acuclillado sobre un pequeño templo adornado con nichos, que recuerda la arquitectura de aquel sitio.