Bernal Díaz del Castillo se refiere a un grupo de “grandes oficiales” de la orfebrería, a quienes denomina los “plateros del gran Montezuma”.

Del siglo XVI al XVII surgen en abundancia los códices llamados “coloniales”, que permiten conservar el antiguo sistema de “escribir pintando”.

De los códices prehispánicos muy pocos existen actualmente, porque desde la conquista fueron destruidos en forma generalizada.

La ilustración que presentamos se refiere al relato de intento de fuga del emperador Motecuhzoma II, con el objeto de no enfrentar los funestos acontecimientos que se presagiaban.

Los lugares perdidos o imaginados son parte de la narrativa fantástica en todas las culturas y geografías.

En favor de la elección de Cuitlahua influyeron su prestigio militar, su papel en la expulsión de los españoles de Tenochtitlan y su linaje.

Heredero de un imperio de vastas proporciones, bajo su dominio la ciudad de Tenochtitlan vivió ese esplendor que asombró a los españoles.

La tradición ha señalado que fue en el vetusto árbol que se encuentra en Tacuba –o lo que queda de él, pues por lo menos en dos ocasiones ha sido quemado– donde ocurrió el hecho.

Según parece el dinero español y las monedas nativas (sobre todo el cacao) funcionaron juntos en un solo sistema monetario integrado.

Eduardo Matos deja claro que los huesos encontrados en Ichcateopan  (Ixcateopan) no pertenecen al afamado tlatoani y nos enseña que tal idea se sostuvo porque así convenía a los gobernantes en turno.

La muerte del último tlatoani mexica ocurrió en Itzamkánac en 1525. No se sabe el destino que tuvieron sus restos.

El 13 de agosto de 1521, tras deliberar con su Consejo, Cuauhtémoc decide rendirse a los españoles con el fin de evitar más sufrimientos.

Se encontraba entre los nobles mexicas que desde un principio se opusieron a los españoles.

Nacido alrededor de 1500, fue hijo de Ahuítzotl, octavo tlatoani mexica, y de Tilacápatl.

Cuauhtémoc es, a los ojos de los mexicanos, un ejemplo de heroísmo y símbolo inequívoco de nuestra identidad.