En los códices mayas encontramos variantes de los relatos que provienen del Posclásico y que más tarde fueron escritos con el alfabeto introducido por los españoles.
En el Códice Madrid, p. 51, el dios de los comerciantes está representado una veintena de veces y en varias formas. Una recurrente es la que ostenta su cuerpo pintado de negro.
Aunque 8 Venado llegaría a ser gobernante de Tilantongo y de Tututepec, ninguno de sus padres tuvo alguna relación genealógica con las familias gobernantes de esos señoríos.
La técnica de elaboración de las efigies explica el porqué de las semejanzas entre ellas. Aunque los cuerpos fueron modelados, los rostros se manufacturaron con un molde.
Los habitantes de Tenochtitlan también emplearon vasos y jarras, de cerámica o de piedra, decorados con la faz de Tláloc o simplemente pintados de azul.