El Ch’a Cháak tiene como objetivo asegurar la benevolencia de las deidades de la lluvia a fin de contar con el agua necesaria para la supervivencia humana y, con ella, del universo todo.
El lapso entre 1968 y 2000 se caracteriza por la madurez y el crecimiento institucional de la arqueología mexicana, lo que se refleja en la relación de ésta con el poder y con el público, así como en la influencia de proyectos extranjeros.
Durante el Clásico, los hohokam edificaron plataformas en varios sitios, aunque no superaron en número a las localidades del Preclásico que tuvieron juegos de pelota.
Las flores -como expresión fundamental de la naturaleza estuvieron impregnadas de distintos significados. La importancia que tuvieron en el México antiguo prevalece en gran parte de las comunidades de tradición mesoamericana.