Los combatientes de batallas rituales esconden su identidad individual bajo un casco, como en Dainzú, o bajo una máscara, como en Teotihuacan o Bilbao.

Conocer cómo funcionaba la producción artesanal permite tener una idea de la manera en que estaba organizada una sociedad como la mesoamericana.

En Atzompa se han identificado dos tipos de vajilla doméstica: la de pasta amarilla (comales, ollas, tecomates y braseros) y la de pasta gris (recipientes de formas y tamaños variados).

La restauración de cerámica garantiza la conservación del patrimonio, lo cual no se logra únicamente con la intervención directa, son necesarios otros procedimientos.

Hacia el fin de la época anterior a Cristo o principios de nuestra era, no muy lejos de Monte Albán, Oaxaca, un consumado artesano alfarero produjo varias efigies cerámicas casi idénticas.

Con base en los vestigios localizados se determinó que la región estuvo habitada desde hace 2200 años y que ahí se desarrolló, con variantes , la llamada tradición de Tumbas de Tiro.

Especialistas en restauración de cerámica devolvieron su forma a 19 vasijas elaboradas hace más de 600 años por los pueblos del desierto de Sonora.

Representa a una divinidad proveedora y fecunda, de ahí sus dos penes, que año con año y ciclo con ciclo daba vida a los seres humanos.

La cerámica huasteca localizada en Veracruz está hecha generalmente de pasta clara, con dibujos en tonalidades ocres o con trazos negros sobre blanco. 

Las esculturas son de barro y probablemente representan a sacerdotes o deidades.

Las esculturas antropomorfas y zoomorfas de Xochicalco mezclan lo natural con lo divino y poseen un gran contenido simbólico.

Durante la larga historia de Monte Albán, los artesanos del valle de Oaxaca destacaron por su inigualable habilidad alfarera, plasmada en lo que hoy llamamos...

La cerámica policroma del estilo Mixteca-Puebla proveniente de Cholula fue una de las lozas más atractivas y coloridas de la Mesoamérica prehispánica.

Los miembros de la corte real de Calakmul tenían preferencia por las vasijas en que se plasmaban escenas del ciclo mitológico de la deidad del maíz.