La investigación en la denominada aldea preclásica de Tlalpan, se suma a otras que dan nuevos bríos a los estudios del periodo Formativo en esta área de la Ciudad de México.

5 ocasiones en que se consumían o se ofrendaban algunos tipos de tamales.

La manera común de preparar el maíz, en muchas regiones, y desde épocas remotas, fue lo que conocemos como tamal.

Aunque las fuentes describen esas celebraciones para la Cuenca de México, dejan ver que se efectuaban en todo el altiplano.

Si nuestro trabajo se enfoca sobre el patrón arquitectónico y urbanístico del juego de pelota, es necesario mencionar algunos aspectos de su valor simbólico.

Como todas las culturas humanas, los pueblos nahuas que poblaban el centro de México en el siglo XVI contaban historias sobre el origen del mundo en que vivían.

Las fuentes documentales describen cómo muchos hombres comunes utilizaban la magia. 

Dentro de los llamados huehuetlatolli, hay dos discursos muy significativos que hacían los padres mexicas a sus hijos; en ellos se amonesta a las y a los jóvenes antes de casarse.

“Tienes que cantar la voz de la hojita” me decía un joven chamán mazateco hace años cuando estudiaba la planta llamada “ska” pastora u hoja de la pastora.

Algunas figurillas modeladas de la fase Tzacualli de Teotihuacan fueron interpretadas como representaciones de Xipe Tótec o de su forma ancestral, el dios con máscara.

El impacto de la muerte sobre los vivos y su actitud ante la pérdida llena miles de libros de psicología, escatología y demás.

José Hernández, de Matatlán, desgrana cuatro maíces blancos y les tizna una de las caras, con hollín que toma de la olla, recogiéndolo en un totomostle.

En la celebración se prepara una comida en recuerdo a los muertos.

El culto a los muertos ha existido en todas las culturas, pues el hombre siempre ha realizado ceremonias en su honor las cuales son tan antiguas como la humanidad misma.

En  varios pueblos de México con esta flor se  evoca a los difuntos.